Pequeño restaurante en pleno centro del pueblo pesquero de Begur. Tiene una cosa que, personalmente, cada vez valoramos más, como es una carta muy corta, especializada, es decir, pocas cosas pero bien hechas y con buen producto, más vale lo poco y bueno, que lo mucho y menos bueno. A saber, media docena de entrantes y el pescado que tienen ese día…, te lo muestran en una bandeja y tu eliges el que quieres… Punto.

Nada más entrar al restaurante ya te han ganado al percibir los aromas que desprende su curioso horno de leña, aromas que te hacen recodar a las típicas comidas de la abuela estimulándonos ya las papilas gustativas desde la llegada…

El chef Jordi Barreda nos ofrece unos entrantes exquisitos entre los que destacan unas ensaladas deliciosas, pulpo a la brasa de perfecta ejecución, y garbanzos con tripa de bacalao.

Y para los segundos dispone de carnes excelentes, pero venir a este restaurante y no comer sus pescados frescos del día es como ir a la Bodeguita del Medio en la Habana y pedir un Gin Tonic…. Tiene una gran variedad de pescados, todos tan frescos que parece que están dando su ultimo hálito de vida, te los presentan en una bandeja y tu escoges el que quieras, si no disponen de ellos ese día, no los ofrecen y punto.

Tienen una peculiaridad y es que el pescado te lo hacen a la brasa a la vista, cerca de ti. Si podéis pedir una mesa no pegada a las mismas por si os pueda molestar el humo. En fines de semana imprescindible llamar para reservar.

Restaurante sugerido por nuestro amigo Carmelo Rodrigo que no os decepcionara si queréis comer pescado fresquísimo y bien cocinado, como él mismo dice.. uno de los templos del pescado en España.