INGREDIENTES PARA 4 PERSONAS:
3 Morcillas de arroz
12 Placas de lasaña precocida
1 Bandeja de setas de cardo
1 Bandeja de champiñones
1 Cebolla
2 Cucharadas de harina
Queso Emmental para gratinar
Leche
Sal
Nuez Moscada
Aceite de oliva virgen extra
Aceite de girasol
ELABORACIÓN:
Troceamos la cebolla, las setas y los champiñones en trozos pequeñitos y quitamos la piel a las morcillas y las troceamos (no hace falta que sean trozos pequeños porque luego al freírla se deshace).
En una cacerola ponemos aceite virgen extra y añadimos la cebolla con sal y rehogamos. Cuando empieza a ponerse transparente, incorporamos las setas y los champiñones ya troceados y lo mezclamos bien con la cebolla.
Cuando se evapore todo el agua que sueltan las setas y champiñones en el rehogo, incorporamos la morcilla troceada y lo revolvemos todo hasta que se nos deshaga la morcilla y nos quede como una pasta. Entonces, incorporamos una cucharada rasa de harina a la pasta y lo removemos un par de minutos para que se cocine la harina con todo y vamos incorporando un poco de leche hasta que nos quede una pasta sólida pero suave que será el relleno de la lasaña y lo reservamos.
A continuación preparamos una bechamel no muy espesa con aceite de girasol, harina y leche, sofriendo en el aceite un par de cucharadas rasas de harina y, cuando se está empezando a dorar, vamos añadiendo leche poco a poco y removiendo para deshacer los grumos y que adquiera la textura adecuada, se rectifica de sal y se añade una pizca de nuez moscada y la reservamos.
En una bandeja para el horno profunda o una de barro como la que veis en la foto, ponemos unas cuatro cucharadas de bechamel en el fondo para que no se nos peguen las placas de lasaña. Ponemos luego una placa por comensal y encima de cada placa dos cucharadas de la mezcla de morcilla. ( Las placas de lasaña, si son de las de mantener previamente 20 minutos en agua caliente se ha previsto con anterioridad, si son solo de horno, pues no).
Otra placa y la misma operación. A continuación ponemos encima la tercera placa y sobre esta añadimos la bechamel de tal manera que las cubra totalmente.
Encima añadimos el queso Emmental y con el horno precalentado a 250º lo dejamos en la posición media del horno unos 10 minutos para que se caliente todo bien y se cocinen las placas ( o el tiempo que aconseje la marca de las placas de lasaña en concreto)
A continuación ponemos el horno en posición de gratinar y subimos la bandeja para que se acabe de tostar el queso durante más o menos unos 4 minutos, dependiendo de la fuerza que tenga el horno y vigilando para que no se nos queme…
Y… LISTO PARA COMER!!!
FACIL, RÁPIDO, ECONÓMICO Y …¡¡RIQUÍSIMO!!
¡BUEN PROVECHO!