A 8 km hacia el interior de San Vicente de la Barquera, nos encontramos con una pequeña aldea rural, Gandarilla, rodeada de un paisaje verde típico de Cantabria.

Es aquí donde se encuentra La Coteruca, que además de ser una bonita y confortable posada, cuenta con un pequeño comedor donde podemos disfrutar de una auténtica y tradicional comida cántabra.

Nada más entrar te encuentras con la típica barra de bar de pueblo, generalmente muy animada, donde se aprecia perfectamente gente oriunda del pueblo y otros de paso a comer o a tomar un blanco o vermut. Cuenta con un excelente blanco de solera.

No os molestéis en preguntar por pescados, su especialización está en sus carnes de primera calidad procedente de reses, Tudanca y Frisona, de ganadería propia. Suelen tener un plato de cuchara del día entre los que destaca el arroz meloso con carne, el cocido montañés o las alubias rojas estofadas. Especial mención merecen las soberbias ensaladas y riquísimas patatas fritas caseras de toda la vida, que en pocos sitios se ven hoy en día. Buenas copas para el vino también, detalle que no siempre se tiene en cuenta en este tipo de sitios.

Los postres son también caseros y están a la altura del resto de platos: arroz con leche cremoso, tarta de queso, flan del de toda la vida, etc.

Lo que más nos sorprendió fue la excelente relación calidad/precio. Comiendo a la carta salimos a 20 € personas más vino, con postres y cafés incluidos.

Muy buena atención y trato familiar por parte de las hermanas Marian y Nuria, como si estuviéramos en casa. Recomendamos reservar por lo pequeño del comedor.